Las personas optimistas motivan, alegran, inspiran, animan y dan aliento para continuar antes los desafíos.
Imagina la vida sin optimistas, uuu, ¿no alienta verdad?
La actitud optimista es esa disposición a “esperar siempre lo mejor” y además forma una parte muy importante como base del camino hacia la conquista de la Mente Positiva.
El optimismo por si solo, tiende a oscilar en polaridad. Es habitual ver en los optimistas esta oscilación al pesimismo, o sea unos días todo está bien y otros todo se ve negro. Eso es señal de que aún falta madurar y alcanzar la mente positiva, además de auto estima.
La exageración del optimismo se transforma en ilusión y la negación del mismo se transforma en pesimismo, ambos son desequilibrios de la mente, que pueden ser dominados.
Ser un optimista equilibrado, refleja un alto grado de confianza en los proceso de la vida, demuestra cierta comunión con lo divino. Por eso cuando equilibras este aspecto, puedes estabilizar la mente en la polaridad positiva y así subes el nivel de consciencia.
En resumen, si eres del tipo optimista, continúa con eso, no te deprimas cuando los negativos se burlen de ti, pero observa “que es lo que te impulsa a ser así”. Profundiza en ello, hasta que la razón esté adentro de ti y no sea solo un estatus condicionado por eventos externos que te animan.
Cuando eso factores externos no estén, ¿qué sostendrá tu optimismo?
Abrazos, Jaytaram
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